La semana pasada dos partidos de signo político en Portugal presentaron dos propuestas encaminadas a legalizar el cannabis para adultos.
El miércoles de la semana pasada en el Parlamento portugués, dos partidos como Bloque de Izquierda y Liberal Iniciativa presentaron dos propuestas dirigidas a legalizar el cannabis para adultos. Como resultado, ambas propuestas se enviarán a la Comisión de Salud durante sesenta días, en ese tiempo se podrán hacer audiencias publicas donde presentar enmiendas o discutir y armonizar antes de que llegue a la votación en el Parlamento.
Un representante del Parlamento portugués dijo a Prohibition Partner que, el proyecto de ley “probablemente no se someterá a votación final antes del final de esta sesión legislativa”. La sesión estaría programada a finales de verano.
Las propuestas para legalizar el cannabis para adultos
En las dos propuestas presentadas por partidos diferentes y encaminadas a legalizar el cannabis para adultos, recogen el auto cultivo, el comercio, su distribución y su posesión. Dentro de la propuesta del cultivo personal de cannabis presentado, estaría una cantidad de hasta seis plantas por hogar según Liberal Iniciativa y en la propuesta de Bloque de Izquierda serían de cinco plantas
También, las dos propuestas presentadas tendrían un limite en la cantidad de adquisición. Existirán restricciones para su consumo, como su prohibición en lugares de trabajo, zonas publicas, parques o jardines de niños o en transportes públicos. También existirían limitaciones de la cantidad de THC en los productos. Deberían estar correctamente puestas las advertencias sanitarias en los empaques y éstos deberían ser robustos y adecuados con las cantidades exactas de su contenido o distintos cannabinoides.
Una clara diferencia entre las propuestas del Bloque de Izquierda y los Liberales, es que en la propuesta de los primeros se propondría tanto el cultivo, producción y posterior distribución, además de control de usuarios, y el control estaría a cargo del estado. Es más, estarían en contra de los productos sintéticos y procesados, junto a las bebidas con alcohol infundidas.
Por otra parte, la propuesta de los liberales, no abogaría por un mínimo control estatal de los usuarios o su comercio en consonancia con la “cultura de la libertad” que va adherida con el cannabis, dice el partido Iniciativa Liberal. Sin embargo, esta formación política si estaría a favor de la autorización de productos relacionados (bebidas infundidas y más)
También en el tema de precios las dos propuestas serían diferentes, mientras el Bloque de izquierdas buscaría una regulación del estado de precios y productos similares al mercado ilícito como forma de combatir este mercado ilegal. Los liberales se basarían en el libre mercado y que fuese el comercio y venta el que lo auto regulase.
Los Liberales no quieren que la izquierda se “apropie de ciertos temas”
El líder de Iniciativa Liberal (IL) João Cotrim Figueiredo, dijo:“ Al defender la consagración de un derecho, no estamos respaldando ni recomendando su uso ”. Y dejó un mensaje “Initiative Liberal no cometerá el error de otros que, durante décadas, han permitido que la izquierda se apropie de ciertos temas”. Además añadió que la libertad de decisión de los ciudadanos, se basa en el reconocimiento del “fracaso absoluto del enfoque prohibicionista” y en la responsabilidad individual y el libre mercado.
“No queremos pasar de un modelo en el que se manda a los traficantes a otro en el que se ordena al Estado. El papel del Estado no es beneficiarse de los hábitos o vicios de las personas, sino garantizar que las normas se apliquen de forma universal y responsable en asuntos socialmente relevantes. Entre ellas están, por supuesto, temas como la venta a menores o a personas con trastornos mentales, la concentración de THC, el etiquetado y las advertencias sanitarias” enfatizó.
Portugal abre el debate en busca de un proceso participativo e inclusivo” que se traduciría en una “ley considerada, rigurosa y efectiva” para la legalización del cannabis para uso personal, considerando que puede avanzar “con amplia consenso ”en la actual legislatura.
Tiendas de CBD: la doble paradoja del llamado cannabis legal
La falta de regulación obliga a que los dueños de las tiendas te digan que el CBD no es para consumo humano cuando la mayoría de los clientes lo compran para consumirlo. También la mayoría de los clientes compran el CBD por sus propiedades medicinales, pero estos productos no cuentan con un seguimiento médico.
Espero en un semáforo cuando descubro a mi lado un cartel con una planta de marihuana de un metro de alto que anuncia una tienda de CBD. Pocos días después un anuncio en la radio me invita a convertirme en franquiciada y abrir mi propia «cannabis store». ¿Qué es el CBD? ¿Qué es una «cannabis store»? ¿Es legal todo esto?
El CBD es uno de los cannabinoides que hay en la planta cannabis sativa. La Organización Mundial de la Salud emitió un informe en 2017 que afirmaba, entre otras cosas, que el CBD no es adictivo y tiene propiedades beneficiosas para el ser humano. En España falta una regulación sobre el CBD aunque su venta no es ilegal siempre que no sea para consumo, de ahí que cada vez haya más tiendas. Aquí nos encontramos con una de las dos grandes paradojas que se dan en nuestro país en relación al CBD: muchos de los clientes de estas tiendas compran los productos para consumirlos, pero en las tiendas tienen que dejarles claro que no son para eso. Así que, para cumplir con la legalidad, en las tiendas venden los productos que contienen CBD como cosmética, aromaterapia, incluso como artículos de coleccionista.
El comprador sabe que va a consumir lo que va a comprar y el vendedor también lo sabe, pero no pueden hablar de ello. Equivaldría a entrar en una frutería a comprar un plátano y que el frutero te dijera: yo no puedo decirte que te lo comas, solo puedo decirte que queda muy bonito como decoración.
La sombra de la legalidad –o la falta de ella– es muy alargada
La palabra cannabis está unida a la ilegalidad y el CBD proviene de ahí, por lo que las tiendas que venden estos productos se suelen preocupar por dejar clara la legalidad vigente –o la falta de ella– en España y por qué y cómo venden sus productos. La información legal suele abundar en sus páginas web, en folletos que puedes recoger en las propias tiendas y también en carteles que hay tanto en el exterior como en el interior de los comercios.
La página web de CBD House Madrid afirma: «Las flores –que vendemos– cumplen con la regulación española, en concreto el Real Decreto 1729/1999, manteniendo los niveles de THC por debajo del 0,20% según exige la normativa». Este es otro tema legal: el THC es el principal componente psicoactivo del cannabis, lo que hace que «coloque» y le da al cannabis la categoría de estupefaciente. Por eso los productos CBD no pueden tener más de 0,20% de THC. Todas las tiendas que he visitado tienen a mano los informes de procedencia de sus productos que demuestran que ninguno sobrepasa el 0,20%. Este límite es una normativa europea y no algo decretado por nuestro país pero sí aceptado.
A nivel europeo el CBD está reconocido para consumo humano pero en España no «por eso nos obligan a establecimientos como CBD House Madrid –siguiendo con la web de la misma tienda– a advertir de que no es apto para el consumo humano». La web añade que no se hacen responsables del libre uso que los clientes den a sus productos.
La franquicia Cannabis Store Amsterdam, presente en distintas ciudades europeas y en dieciocho españolas, afirma en su web: «Nuestros productos no son para fumar, ingerir o inhalar, sino que son objetos de naturaleza exclusivamente ornamental y decorativa y son perfectamente legales». Recordemos el plátano: sé que te lo vas a comer pero yo te tengo que decir que es para que decores tu casa. La web de esta franquicia refleja muy bien lo larga que es la sombra de la legalidad –o la falta de ella– pues incluye un apartado llamado Abogados que te remite a todos los letrados que tiene la empresa.
Una vez revisadas las páginas web, carteles y folletos, llega el turno del vendedor. Óscar es el dueño de CBD House Madrid: «Al principio siempre le decimos al cliente: te vamos a tener que soltar una chapa legal y luego el uso que tú le des».
CBD medicinal
Si parece no existir una tienda de CBD sin espacios dedicados al apartado legal, también es difícil dar con una tienda que no dedique muchos espacios a hablar sobre las propiedades del CBD. Nuevamente nos encontramos con las páginas web, folletos y carteles dentro y fuera de los comercios. Pero no son carteles como puede haber en otras tiendas anunciando ofertas, por ejemplo. Son carteles que explican las propiedades beneficiosas para la salud del CBD.
Esto es solo una pequeña parte de lo que se puede leer en estos espacios: el CBD alivia los síntomas de la ansiedad, estrés, insomnio, posee efectos antidepresivos, alivia el dolor, tratamiento contra el cáncer, alivio del dolor menstrual, reduce los síntomas asmáticos y un largo etcétera. Además suele haber un espacio para las mascotas, para las que el CBD también tiene propiedades beneficiosas.
La web de CBD House Madrid advierte de que el uso del CBD no cura, previene ni trata ningún tipo de enfermedad, solo alivia sus síntomas derivados y te anima a que consultes con tu médico sobre las propiedades, usos y beneficios que el CBD puede proporcionarte. Uno de los folletos de la franquicia Cannabis Store Amsterdam se pronuncia en la misma dirección: «No son medicamentos ni pretenden ser sustitutivos de cualquier tratamiento médico recomendado». Aquí nos encontramos con la segunda gran paradoja de las tiendas de CBD: muchos de los clientes consumen estos productos precisamente para aliviar sus problemas de salud y, sin embargo, son tiendas que no cuentan con una supervisión médica.
José Javier es el empleado de una de las tiendas madrileñas de la franquicia Cannabis Store Amsterdam: «A mí esto me cambió la vida, yo tenía asma, renitis, también soy hiperactivo, y a mí esto me sienta muy bien, me regula». Tiene 52 años y defiende que el CBD tiene muchos beneficios y que él mismo es la prueba. «A mí aquí me han mandado gente con dolores crónicos, por ejemplo. Tengo un público generalmente mayor, de 50 para arriba, hasta de 90 años. El virus nos ha triplicado las ventas porque hay mucha ansiedad, hago servicio a domicilio y durante el confinamiento hice muchos nuevos clientes». Mientras me cuenta esto entra en la tienda un señor, más cerca de los sesenta que de los cincuenta, para comprar flores.
Ni José ni Óscar, dueño de CBD House Madrid, tienen formación sanitaria. «Nosotros en la tienda trabajamos cómo adaptarlo a cada persona, esto no se puede usar de forma generalizada, depende de cada uno», explica Óscar. «Yo tengo insomnio desde los 15 años –ahora tiene 31– y a mí me ha ido muy bien, eso no quiere decir que si tú también tienes te vaya a funcionar exactamente igual que a mí, hay que tener muchas cosas presentes a la hora de tomarlo, como tu peso, por ejemplo, para calcular las cantidades. Nosotros trabajamos el CBD adaptado a cada persona, siempre teniendo en cuenta que no es un producto milagro. El problema es que no le podemos decir a la persona que lo consuma, así que lo que tenemos que hacer es decirle que investigue vídeos sobre cómo lo hacen en países donde sí se puede consumir como Suiza, Estados Unidos o Canadá. En esos vídeos te das cuenta de toda la capacidad que tiene el producto para sacarle el mayor partido, menos mal que está internet y podemos recomendar sitios a los que pueden recurrir». A Óscar también le aumentaron los clientes con la pandemia y la entrega de productos a domicilio: «La gente se ha sentido ansiosa, agobiada, intranquila, estresada, y además de teletrabajar han salido muchos dolores de espalda y migrañas».
«El problema de las tiendas es que no existe preparación, quienes las abren no tienen formación para el uso médico del CBD, pero el CBD actúa como un medicamento y puede tener interacciones con otros fármacos que estés tomando, por ejemplo. Que el CBD no coloque no debería querer decir que haya barra libre a la hora de venderlo. Una cosa es usar CBD por placer, que me parece fenomenal, y otra tomarla de manera médica, pero la falta de regulación hace que se mezcle todo», se queja Carola Pérez, presidenta del Observatorio Español del Cannabis Medicinal. «Yo no tengo nada en contra de la gente que abre esas tiendas, pero al final quien pierde es el paciente, porque si vas y lo que te ofrecen te funciona, pues genial, pero si no… Hablo como paciente que soy, cada persona necesitamos un tratamiento personalizado y supervisado por un médico».
«Luego está que la gente se piensa que el CBD es la única parte medicinal del cannabis y no es verdad. Hay pacientes, como es mi caso, que necesitamos mucho más que el CBD, necesitamos el THC para nuestro tratamiento. Por eso yo necesito que existan cannabinoides disponibles, y no solo el CBD, para tratar mi patología porque tengo dolor crónico muy fuerte. El CBD es solo una parte y nosotros en el Observatorio queremos el cannabis completo, ojo. El ideal es que haya una regulación y el médico recete al paciente lo que necesita del cannabis y que este sea un tratamiento más. Y volviendo al CBD en concreto, hace muy buena labor, pero vamos a venderlo como dios manda, que los de las tiendas no tengan que estar engañando cada vez que venden un producto y, sobre todo, vamos a ponernos en el lugar del paciente, de nuestras necesidades, y para eso hace falta un seguimiento médico», concluye Carola.
Las tiendas de CBD venden desde infusiones a caramelos, pero las ventas principales están en los aceites, flores y cremas, productos que en muchos casos se compran por sus propiedades medicinales.
Desde que el mundo es mundo, el ser humano ha tenido gran avidez por la carne: tocarla, agarrarla, morderla. Hasta en el apasionado encuentro amoroso parece que los amantes quisieran devorar a su partener. Este deseo irrefrenable tiene su correlato en la alimentación; por algo existe el dicho “Dime qué comes y te diré quién eres”
Por Dra. Andrea Mindlin
La New Age y la tradición del cuidado de la salud
A mediados del siglo XX se puso de moda una corriente antropocentrista, la New Age o Nueva Era, procedente de la creencia astrológica de que el sol pasa un período de tiempo por cada signo del zodiaco, y según la cual ahora estaríamos en la Era de Acuario; el sol habría salido del signo de Piscis para entrar en el de Acuario. Ese paso traería aparejado grandes cambios sociales, relacionados con la paz y la prosperidad. Los adeptos de estas modernas creencias siguen una serie de premisas que requieren determinados cambios de hábitos, entre ellos la alimentación.
Ya el antiguo y sabio Maimónides (Córdoba 1135 – Fustat, Egipto 1204), médico, rabino y teólogojudíoespañol medieval, además de exponer en sus escritos su visión aristotélica del judaísmo, confeccionó una guía para la salud, donde la principal fuente de la enfermedad era la manera incorrecta de liberar las toxinas del cuerpo. Evidentemente, se refería al sistema digestivo, cuyo correcto funcionamiento es la base de una buena salud. Estas premisas, donde la ausencia de enfermedad se alcanza a partir de una alimentación adecuada, de algún modo son comparables con las de la medicina china y la armonía necesaria entre sus cinco elementos principales (madera, fuego, agua, metal y aire), donde se logra mediante la ingesta de determinadas hierbas. Por otro lado, la medicina ayurvédica también centra el foco de la salud en el equilibrio entre los tres humores fundamentales (Vatta, Khapa, Pitta). El equilibrio entre ellos, en gran medida, es alcanzado por una alimentación acorde con el humor que predomina en cada persona.
La medicina alopática (término que alude a la medicina convencional) utiliza para curar remedios que producen un efecto contrario al que se quiere combatir y no hace demasiado hincapié en la alimentación, pues para sanar ya están los medicamentos.
Paradójicamente, tras la aparición de las nuevas tecnologías y la facilidad para acceder a la información que ha marcado el fin del siglo XX y el comienzo del siglo XXI, la humanidad parece necesitar algo que la conecte más con lo realmente humano y con la naturaleza. La brecha entre el saber del médico tradicional y la información del paciente se ha acortado, y lo que antes funcionaba ahora ya no.
Hay una tendencia general a que las personas den más importancia al cuidado de su salud, y no escapa a esta tendencia el cuidado de la piel. Donde se eligen productos naturales -que tengan poca cantidad o nada de derivados del petróleo dentro de ellos-, la manera de alimentarse ha empezado a formar parte de esta elección, ya que inteligentemente se ha empezado a prevenir antes que a curar.
La verdad es que para tener una piel lozana, tersa y fresca, así como para lograr el sempiterno deseo de no envejecer, lo fundamental es tener una buena alimentación. Y después, si aplicamos una u otra crema contribuiremos más o menos; pero lo que comemos, tomamos, amamos o dormimos, se refleja en la cara.
Los cambios en la forma de alimentarse
En concordancia con las sabidurías orientales, y otras ancestrales como la de Maimónides, hay un cambio sustancial en la manera de nutrirse. El cambio fundamental está dado por la supresión de las carnes. Según las distintas corrientes, se destierran del menú todo tipo de carnes, o bien se acepta sólo pescado. Lo cierto es que la carne, sobre todo la vacuna, es de difícil digestión; su tránsito por el intestino es muy lento, por lo que, si después se ingieren frutas, o lácteos, ambos verán obstaculizado su paso por el intestino, que es donde se termina de degradar los alimentos mediante la acción de las enzimas, para su posterior absorción. Si los alimentos están dentro del intestino un tiempo, prologado, empiezan a fermentar, comienzan a generar toxinas y radicales libres, que no son ni más ni menos que moléculas muy reactivas que se adhieren a otros compuestos, a los que pueden llegar a deteriorar. Tal es el caso del colágeno (fibras constitutivas de la piel) que dan el aspecto juvenil a la piel. Al adherirse los radicales libres, deterioran las fibras y las vuelven más laxas, lo que se va a traducir en las indeseables arrugas del rostro.
Muchas son las diversas tendencias que defienden la no ingestión de carne, con distintas variantes:
Lacto-vegetarianismo: son los vegetarianos que no consumen carnes ni huevos, pero sí productos lácteos.
Ovo-lacto-vegetarianismo: los practicantes de esta corriente consumen huevos y productos lácteos, pero no carne ni peces. Esta es la variación más común en nuestra cultura occidental.
Ovo-vegetarianismo: quienes practican esta tendencia son aquellos que no comen carnes ni productos lácteos, pero sí huevos.
Vegetarianismo estricto: es una alimentación que excluye todo producto de origen animal. Rechaza en consumo de los cadáveres de animales y el de huevos, lácteos y miel. Dentro de esta variedad de alimentación están los practicantes del veganismo (del inglésvegan).
Crudívoros, tendencia comúnmente conocida como raw food (“comida cruda”) en su denominación en inglés. Snismo
El veganismo es particularmente interesante por la filosofía que conlleva, además de abrir un mercado muy saludable dentro de la cosmética. Es la práctica o estilo de vida que consiste en abstenerse del consumo o uso de productos de origen animal. En el sentido más estricto, es una actitud ética caracterizada por el rechazo a la explotación de otros seres sensibles como mercancía, útiles o productos de consumo; por esto se considera que los veganos tienen una cosmovisión sensocentrista. En cuanto a la práctica colectiva, los sensocentristas consideran que la explotación de los animales debe ser abolida. Debe derogarse la condición de propiedad que actualmente tienen los animales no humanos y concederles, en su lugar, derechos animales que protejan sus intereses básicos. En este sentido, se puede afirmar que el veganismo es un movimiento abolicionista, pues no tiene como objetivo una mejora en las condiciones de vida de los animales explotados, como pide el bienestarismo, sino que plantea el final absoluto de su explotación.
Los veganos rechazan todo tipo de ropa y calzados confeccionados con lana, cuero, pieles y sedas, por provenir de un origen animal. En cuanto a la cosmética, además de no usar productos que procedan de animales, tampoco usan los que fueron probados en animales. Por ejemplo, para que una agencia regulatoria apruebe un producto cosmético y pueda salir al mercado, se deben presentar determinadas pruebas de seguridad, por ejemplo la de irritación ocular. Obviamente, no se le aplica a un ser humano el producto, y para saber qué nivel de irritación produce se utilizan animales de laboratorio, generalmente esas hermosas cobayas blancas.
Otros productos que no se deben utilizar en cosmética vegana son, por ejemplo, la lanolina, la cera de abejas y los parabenos (que se usan como conservantes). La lanolina es un componente casi esencial de las cremas. Es una cera procedente de los ovinos, muy hidratante y emoliente; tiene una untuosidad y una textura que la convierten en muy apta para la fabricación de cremas, especialmente para las pieles muy secas. Pero se puede reemplazar por la vaselina, que, si bien es un compuesto derivado del petróleo, existen variedades sólidas de alta pureza: es cuestión de asegurarse de que no tengan impurezas, fenólicas, típicas de estos compuestos, que además son cancerígenas.
Otro compuesto que vale la pena mencionar, por la escasa buena información que hay al respecto, es la glicerina. La glicerina, glicerol o propanotriol, es un tipo particular de alcohol que puede tener un origen animal o vegetal, como por ejemplo el aceite de coco o de jojoba. Se utiliza para hacer cremas, jabones, detergentes, y también como parte constitutiva de otros maquillajes. Ahora bien, este tipo de alcohol en particular no es el que encontramos en la farmacia, ni con el que nos emborrachamos, sino que es el que se usa para fabricar jabones. Las grasas, ya sean de origen animal o vegetal, son moléculas enormes que contienen dos partes; una es la parte carboxílica, que está unida a la glicerina.La parte carboxílica tendrá diferentes características, dependiendo del origen de la grasa, pero aquí esta el meollo de la cuestión: la glicerina es siempre el mismo tipo de molécula y no varía porque provenga de una grasa animal o de una grasa vegetal. Entonces, si queremos fabricar, por ejemplo, un jabón vegano -cuya base fundamental es la glicerina-, si la extraigo de una grasa animal y le realizamos un proceso exhaustivo de purificación, es decir, nos aseguramos de que la glicerina obtenida a partir de grasa animal no tenga ni la más minima traza de compuesto carboxílico, veré, para mi sorpresa, que si hago exactamente lo mismo, pero con grasa vegetal, para obtener glicerina vegetal, la molécula pura de glicerina será exactamente la misma, se haya usado grasa animal o vegetal. Aclaramos que si la glicerina obtenida a partir de grasa animal experimenta un proceso de alta purificación, será exactamente la misma glicerina que si el proceso comienza con una grasa vegetal. Lo que ocurre es que la grasa vegetal –por ejemplo, el aceite de coco- es mucho más cara que cualquier grasa de origen animal.
Por lo aquí expuesto, queda claro que, en el caso de la glicerina, lo importante es su grado de pureza, más que la grasa de la cual se ha obtenido. Lo que ocurre es que vivimos en un sistema capitalista, cuya base principal es la oferta y la demanda. Se han abierto un sinfín de nichos de mercados con estas nuevas y nobles tendencias, y las empresas fármaco-químicas son muy hábiles para captar este tipo de cambios en los hábitos. Cuando nos venden una glicerina que nos aseguran que es de origen vegetal y de alta pureza, es imposible saber si provino de una grasa animal o vegetal.
El aceite de cannabis
Por suerte, existen en la naturaleza compuestos nobles y que necesitan poca manipulación por parte del hombre, como lo es nuestro bien amado aceite de cannabis. Es eco-amigable, no necesita de insecticidas ni fertilizantes, y contiene un aporte realmente importante de ácidos grasos que el cuerpo no fabrica, como el Omega-6, el Omega-9 y el Omega-3. Este último es muy importante porque, salvo el aceite de cannabis y el de lino, las únicas fuentes son de origen animal, como por ejemplo los peces de aguas frías. Además, el aceite de cannabis es una fuente vegetal de vitaminas del complejo B: B1 (tiamina) y B2 (riboflavina). La deficiencia de la riboflavina tiene como consecuencia padecer dermatitis seborreica.
El aceite de cannabis es ideal para el uso vegano, pues al tener propiedades antiinflamatorias, poder bactericida y cicatrizante, se puede usar tanto en cosmética como para que forme parte de un botiquín vegano básico.
Los adeptos a este movimiento deben tomar suplementos de vitamina B12 (cobalamina), que sólo la aportan la leche y el huevo, así como suplementos de hierro (para evitar la anemia), ya que a pesar que las espinacas y otros productos vegetales contienen hierro, la forma en que el hierro se absorbe mejora es la que se encuentra en la carne.
A pesar que estos movimientos tienen sus limitaciones, vale la pena intentar darle la espalda al sistema
Para entender la experiencia del cannabis para las personas con Parkinson, the Michael J. Fox Foundation (MJFF) lanzó una encuesta a través de su estudio online Fox Insight en enero de 2020. Preguntó sobre los tipos de cannabis utilizados y los métodos de uso, así como cómo el cannabis afectaba los síntomas de la enfermedad de Parkinson. Durante cuatro meses, casi 1.900 personas con Parkinson participaron.
La dra. Maureen Leehey, líder del estudio de la Universidad de Colorado denver, presentó recientemente los resultados del estudio en la Reunión Anual Virtual de la Academia Americana de Neurología de 2021. Más de la mitad de los encuestados reportaron beneficios leves sobre el sueño, el estado de ánimo y el dolor. En promedio, los encuestados dijeron que usaron una dosis oral de cannabis una vez al día. Los efectos secundarios eran comunes, pero generalmente leves. Más del 30 por ciento de los encuestados no discutió el consumo de cannabis con su médico.
Todos asociamos el helado al verano, se convierte en el munchie perfecto para refrescar los días de calor, pero, seamos sinceros, siendo helado de marihuana nos apetecería en cualquier época del año.
Ingredientes:
– 1 ½ taza de leche de marihuana – ½ taza de nata líquida – 170 g de chocolate negro – 4 yemas de huevo – ½ taza de azúcar
¿Empezamos?
Lo primero que haremos es colocar en una olla a fuego fuerte la leche de marihuana con la nata líquida.
Cuando rompa a hervir, se aparta del fuego. Vierte la mezcla caliente sobre el chocolate, previamente tendrás que trocearlo, Ahora remueve hasta deshacer todo el chocolate y obtener una mezcla homogénea.
En un bol, bate las yemas de huevo con el azúcar y vierte la mezcla poco a poco sobre la de chocolate. Remueve bien y vierte la mezcla, de nuevo, en la olla. Sigue cocinando a fuego medio hasta que la crema espese.
¡Vamos, ya casi lo tenemos!
Pon la mezcla en la heladora durante 10-20 minutos, hasta que se congele. Después, metemos en el congelador para que se endurezca y solidifique. Si no dispones de heladera, puedes echar la mezcla en una bandeja plana, extenderlo bien, y meterlo al congelador. Tendrás que sacarlo cada hora y remover bien con unas varillas para evitar que se cristalice. Este proceso debe repetirse unas 5 veces, hasta conseguir una textura cremosa.
Según una encuesta con unos 1500 participantes, el 69% de los médicos de familia, internistas, enfermeras practicantes y oncólogos creen que el cannabis tiene valor médico. Respondieron a una encuesta basada en la web de médicos analizada por investigadores de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades en Atlanta, EE. UU. Las preguntas evaluaron los usos y prácticas medicinales relacionados con el cannabis y evaluaron el conocimiento de los médicos sobre la legalidad del cannabis en su estado.
Entre los participantes de la encuesta una cuarta parte (27%) alguna vez había recomendado cannabis a un paciente. Los autores escribieron que “las creencias sobre las condiciones para el uso de cannabis medicinal no necesariamente se alineaban con la evidencia científica actual”. Sin embargo, el conocimiento de los médicos sobre los usos médicos del cannabis es a menudo más avanzado que la ciencia médica para muchas indicaciones potenciales.
De un tiempo a esta parte la vinculación entre CBD y deporte comienza a ser más que habitual, con cada vez más deportistas que se van sumando a su uso
Sin olvidar aquel artículo que en su momento hicimos sobre el subidón del runner, que igualaba los efectos del deporte a los del cannabis, hoy vamos a centrarnos específicamente en los efectos del CBD, derivado del cannabis, que suponen un apoyo en el rendimiento físico.
Y todo sin perder un punto de partida clave: por el momento se carece de investigaciones sólidas que lo confirmen.
¿Qué es el CBD?
Las plantas de cannabis, como la planta de marihuana o cáñamo, contienen más de 115 cannabinoides, cada uno con una estructura química única. El CBD es uno de esos cannabinoides, al igual que el THC, el más conocido.
En palabras de Joanna Zeiger, ex triatleta profesional -olímpica y campeona del mundo Ironman 70.3- y doctora investigadora del uso del cannabis en aplicaciones atléticas: “El THC es el que puede drogarte, mientras que el CBD generalmente no lo hace”.
Zeiger señala que normalmente la marihuana se refiere al cannabis que es alto en THC, pero también tiene algo de CBD. El CBD también puede provenir del cáñamo, que también es un miembro de la familia del cannabis”.
¿Cuál es la dosis para los atletas?
Según Zeiger, la dosis más adecuada de CBD es la más baja posible. “Cuando los atletas comienzan a usar CBD, deben hacerlo con una dosis de menos de 5 miligramos, trabajando lentamente hasta llegar a una dosis que proporcione alivio para el objetivo establecido”.
“La situación ideal es encontrar la dosis más baja que ofrece el mejor alivio con el menor número de efectos secundarios. El mantra en el mundo del cannabis es ‘empieza bajo, ve despacio’”
El CBD a menudo se consume por vía oral como aceite, no obstante, también puede ser ingerido en otras formas, por ejemplo, cápsulas de gel, tinturas, bebidas y productos de confitería, así como aplicado tópicamente.
¿CBD para todo y todos?
El uso de CBD no tiene un tratamiento establecido, por lo que depende del atleta establecer sus propios planes de consumo. Zeiger declara que cuando un atleta comienza a consumir cannabis, es importante definir cuál es el objetivo del cannabis.
¿Alivio del dolor? ¿Mejora del sueño? ¿Disminución de la ansiedad? ¿Recreativo? ¿Dolor muscular? Entender el por qué del consumo de cannabis ayuda al atleta a saber cuál es el tipo de producto más adecuado para él.
Zeiger advierte que el CBD no puede hacer todo, al mismo tiempo que tampoco es para todos. Algunas personas simplemente no desarrollan sus efectos y otras no toleran el CBD. Hay que tener en cuenta que el uso de CBD para la salud y el bienestar no es una solución mágica y no incide en los malos hábitos de entrenamiento.
¿Qué deportistas están usando CBD?
Como hemos señalado, cada vez son más los deportistas profesionales que se han sumado a esta práctica. Entre ellos se encuentran:
Sam Long
“Estaba buscando algo que me ayudara a calmarme y lidiar con el estrés antes de que afectara a mi rendimiento”, dice Sam Long. “El CBD me parece el ajuste adecuado, porque los productos me ayudan a relajarme y mantenerme conectado a tierra cuando necesito estar listo”.
El joven norteamericano, llamado a ser uno de los nombres más importantes en los próximos años, practica una rutina de autocuidado que incluye meditar conaceites esenciales y tomar baños calientes con productos de CBD.
También lo usa en formato gotas que pone debajo de su lengua después de las sesiones de entrenamiento para evitar la inflamación.
“Uso la bebida con infusión de cáñamo a diario, así como el bálsamo para los labios y los músculos, las bombas de baño y el tónico para dormir”, detalla Sam Long.
Gwen Jorgensen
Foto: Talbot Cox
La extriatleta, medallista de oro en los Juegos Olímpicos de Río 2016, explica en su cuenta de Instagram que “cuando el CBD salió al mercado por primera vez, tenía miedo de usarlo“.
Según se le puede leer, “no estaba segura de qué pruebas se estaban haciendo, si las hubiera. ¿Era seguro? ¿Contenía THC? ¿Sería adictivo? ¿Cuáles fueron los beneficios o razones para usar?”.
“A veces tenemos que hacer ejercicio por la noche y esto hace que el cuerpo se acelere y no pueda dormir. Además, durante la fase 4 de mi ciclo las hormonas hacen que dormir sea mucho más difícil de lo normal. En estos casos y en otros (desfase de horarios, etc.) es necesario tener ayuda incluso cuando estás haciendo todo lo demás bien”, comenta en su publicación de Instagram para profundizar en la cuestión.
Holly Lawrence
Foto: Garmin
La británica ha sido una de las últimas en unirse al CBD. También ha sido a través de su cuenta de Instagram donde hemos podido saber que ha comenzado a utilizar estos derivados.
Lawrence escribió que estaba “impresionada son sus ingredientes limpios y bien pensado y, lo que es más importante para mí, una fuente segura de CBD (probado en laboratorio, sin THC)”.
Rachel Schneider
La consumada atleta de media y larga distancia estadounidense también se decidió a probar el CBD para mejorar su rendimiento. La función calmante y relajadora de este cannabinoide lo ha hecho apto para formar parte de la recuperación de esta atleta.
Regulación del CBD
El cannabis ha estado prohibido en todos los deportesdurante la competición desde que la Agencia Mundial Antidopaje asumió por primera vez la responsabilidad de establecer y mantener una lista de sustancias prohibidas en el deporte hace ya 15 años.
En 2018, sin embargo, el CBD fue eliminado de la lista prohibida basándose en la creciente evidencia científica de que el cannabinoide es seguro y bien tolerado en humanos, incluso en dosis muy altas.
CBD y la ciencia
Además de que el CBD ya no está prohibido por la Agencia Mundial Antidopaje, se ha vuelto fácilmente disponible en muchos países con la introducción de productos “nutracéuticos” de venta libre.
Esto se debe a los efectos observados: los estudios preclínicos descubrieron que el CBD tiene resultados antiinflamatorios, neuroprotectores y analgésicos en modelos animales. La evidencia preclínica preliminar también sugirió que el CBD puede:
Proteger contra el daño gastrointestinal asociado con la inflamación.
Promover la curación de lesiones esqueléticas traumáticas.
El daño muscular, que a veces induce el ejercicio (EIMD), deteriora la función muscular e inicia una respuesta inflamatoria. Mientras que esta inflamación es parte integral de la reparación, regeneración y adaptación de la EIMD, una inflamación excesiva puede contribuir al dolor muscular prolongado y a una recuperación funcional retrasada.
En este caso, el CBD actúa como modulador de los procesos inflamatorios. En modelos preclínicos de inflamación aguda, se ha descubierto que el CBD atenúa la acumulación de células inmunes, estimula la producción de citoquinas antiinflamatorias e inhibe la producción de citoquinas proinflamatorias.
De la misma manera, el CBD ha demostrado algunos efectos que pueden ser relevantes para controlar el daño gastrointestinal provocado por el ejercicio. Y es que los estudios preclínicos han revelado que el CBD puede atenuar el daño tisular inducido por la isquemia y colitis.
Algunos informes, igualmente, indican que el CBD mejora el sueño, sin embargo, actualmente se carece de evidencia sólida. Se requiere más investigación para confirmar estas observaciones.
Conclusión
En definitiva, el CBD puede ejercer una serie de efectos fisiológicos, bioquímicos y psicológicos con el potencial de beneficiar a los atletas. Sin embargo, se requieren estudios bien controlados en poblaciones de atletas antes de que puedan llegar a conclusiones definitivas con respecto a la utilidad del CBD para apoyar el rendimiento deportivo.
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